Daniel Zulaika: “No estábamos allí por casualidad”

4 JUIL., 2019
Ha desgranado el papel de los vascos en la expedición Magallanes-Elkano, en la que participaron 31 vascos de los cuales 6 culminaron la vuelta al mundo

Promovido por la Fundación Elkano 500 en colaboración con la UPV/EHU, hoy y mañana se celebra en el Palacio de Miramar de Donostia el curso de verano “Elkano y la primera vuelta al mundo: 500 años después”. Durante la jornada de hoy  Daniel Zulaika, miembro del Consejo Asesor de la Fundación Elkano 500 ha repasado el papel de los vascos en la expedición Magallanes-Elkano,  mientras que el catedrático de la Universidad de Sevilla Pablo E. Pérez-Mallaína ha revisado la vida en los barcos a principios del siglo XVI, y Xabier Alberdi, director del Museo Marítimo Vasco, se ha referido a la construcción naval vasca y la nao Victoria, la nave que culminó la vuelta al mundo.

Daniel Zulaika, licenciado en Historia y  miembro del Consejo Asesor de la Fundación Elkano 500, ha dedicado su intervención al papel de ‘Los vascos en la primera vuelta al mundo’, una expedición que constituyó, según ha explicado “el final del núcleo central de la denominada Era de los Descubrimientos”, un período muy corto de la historia iniciado con el descubrimiento de América y finalizado con la llegada de Elkano a Sanlúcar, en 1922. Euskal Herria aportó a la expedición de Magallanes-Elkano tres naos, 31 expedicionarios, carpinteros y calafates, y una tecnología naval heredera de su tradición de construcción naval.

Zulaika ha subrayado que “los vascos no estábamos en aquella expedición por casualidad” pues ya desde 1248 hubo en Sevilla una importante comunidad vasca, integrada por comerciantes, transportistas y marinos, y que tuvo también un papel relevante en la Casa de la Contratación. Allí destacaron fiuguras como la de Ochoa de Isasaga de Ordizia, Juan López de Recalde de Azkoitia y Domingo de Ochandiano de Durango, entre otros. Estos dos últimos tuvieron una importante participación en los preparativos de la expedición de Magallanes-Elkano. Ochandiano, además, se encargó de dar socorro a Elkano a su regreso.

También durante el largo proceso de preparar las naves estuvieron presentes los vascos. Siete de los cincuenta y siete carpinteros (16%) y quince de los sesenta y seis calafates (23%) que trabajaron en las naos eran vascos. También trabajaron maestres, contramaestres, marineros, peones y otros. Juan y Rodrigo de Garay, de Bilbao, fueron suministradores de material a la expedición.

Los expedicionarios vascos

Del total de hombres que componían la expedición, Euskal Herria fue el territorio que más expedicionarios aportó (31), después de Andalucía (73) y por delante de italianos (27) y portugueses (24). De ellos, 22 eran vizcaínos y 9 guipuzcoanos. 14 en la San Antonio, 9 en la Concepción, 6 en la Victoria y uno en la Trinidad y en la Santiago. La pertenencia a una u otra nave marcó el futuro de muchos de ellos.

Entre los 31 hombres que aportó Euskal Herria embarcaron dos maestres, un contramaestre, siete marineros, nueve grumetes, dos pajes, tres carpinteros, tres calafates, un despensero, un sanitario, un hombre de armas y un sobresaliente. “Tres de los cinco carpinteros y tres de los seis calafates de la armada eran vascos, lo que indica su experiencia en estos oficios técnicos de gran importancia para las naos”, ha señalado Zulaika. De todos ello –cuyas vicisitudes a lo largo del viaje ha ido desgranando  a lo largo de su intevención­­– solo 6 finalizaron la vuelta al mundo, llegando el 6 de septiembre de 1522, o cinco meses más tarde tras ser liberados en Cabo Verde: Elkano, Juan de Acurio, Juan de Arratia, Juan de Zubileta, Pedro de Tolosa y Pedro de Chindarza.

Elkano, un líder moderno

A juicio de Zulaika, el marino de Getaria muestra desde muy joven “una inquietud y una ambición que le hacen destacar”. “No se rinde ante las adversidades. Tras arruinarse y entregar su barco a los prestamistas, acude a Sevilla para volver a empezar”, ha explicado. Las distintas situaciones complicadas que se producen a lo largo de los 3 años de navegación pusieron a prueba su temple: “Elkano tiene muchas de las cualidades de un líder moderno, iniciativa, ambición, una mente ordenada, capacidad de organización, no se rinde ante situaciones adversas, marca objetivos claros, implica y escucha a sus colaboradores en las decisiones, y se preocupa por ellos”.

Al término de su intervención, Daniel Zulaika ha afirmado que “hacen falta más estudios que profundicen en estos expedicionarios, especialmente en los años previos y posteriores a la travesía”.